Cada canción, cada balada, me hace ponerme asi... simplemente nostálgico. Nostalgia de cosas que ya pasaron, cosas que han sido atadas en la enredadera de mi tan revoltosa vida. Recuerdos que solo me dicen que hubo un tiempo donde viví intensamente, viví la vida con pasión y con toda la más pureza intensidad mía.
Cada canción, cada balada suena a un sueño, suena a eso que jode y que alegra, porque la sentiste así, sabes que estabas vivo, o que has vivido las canciones como las escuchas, como las sientes y como las... tienes dentro. Como un torrente de energía que sale de tu pecho y que corre hacia tus labios, hacia tu faz, hacia tu cabecilla emocionada.
Cada canción eres tu en cada momento, en tu furia más expresa, en tu tristeza más sincera, en tu alegría más jocosa, en cada cosa que tu quieras.
Una canción eres tu, soy yo y todo.... porque una canción se vuelve tu himno, tu más significativo grito doloroso, grandiosamente alegre. Una canción son todos tus sentimientos hechos materia, toda tu emoción en libertad y cualquier sentir que llevas dentro vive terrenalmente, solo por una canción.
Todas las canciones del mundo, son una vida, una historia. Todas las canciones del mundo son muchas, pero demasiadas expresiones mudas. Todo, todo lo que el cuerpo siente ve la luz o la noche del mundo cuando una canción se enciende.
Solo una canción es un amor, solo una cancion es tu odio más perverso... todo todo sale con una canción..